Hoy hace ocho días exactos que llegué al Valle de Diós porque El mismo nos trajo. Es difícil expresar algo de todo lo vivido en estos días y compartirlo, ya que son muchas vivencias y muy intensas y muy hondas… No obstante voy a intentarlo, porque son muchas las personas que me lo están pidiendo.
Os comunico con gran alegría que ya está en la portería de nuestro
monasterio el Corazón de Jesús con los brazos abiertos recibiendo a todo el que llega.
Estamos en Valdediós, en el Valle de Dios, y os puedo asegurar que, efectivamente El lo llena todo y se le palpa en cada rincón y en cada persona que se nos acerca. Sobre todo en su Palabra: no os podeis imaginar cómo nos grita aquí la Sagrada Escritura, el Verbo es atronador… ¡Con qué fuerza resuena en este valle!
El domingo pasado, cuando salimos de Valladolid, la proclamación evangélica de la Iglesia nos decía que estuviéramos alegres porque nuestros nombres están inscritos en el Cielo y nos enviaba al mundo entero. La gran exhortación evangélica de ese día era: «¡Poneos en camino» Y así lo hicimos… 
Fue un momento particularmente emocionante ese «salir de nuestra tierra» y ponernos en camino apoyadas en sólo Jesús. Me acordaba del báculo de Santa Teresa y de todo lo que ella caminó apoyada en él. Y recordé cómo el único Báculo de la Santa Madre fue Cristo. Y agarradas a El, y apoyadas en El, nos pusimos en camino.
Hoy vamos a celebrar nuestra primera misa dominical en Valdediós, en la gran iglesia del monasterio, la iglesia de Santa María la Real, y el Evangelio de la liturgia del día es el del Buen Samaritano. Ni que decir tiene que, en estos momentos en que estamos trabajando a destajo para preparar y ofrecer cuanto antes nuestra Posada Samaritana, este es otro detalle providencial del Señor para con nosotras.
El Evangelio nos habla de misericordia y de ser prójimos. Prójimo viene de «próximo», cercano, solícito, cariñoso… Prójimo es el que practica la misericordia, e
l que entrega el corazón y la vida al servicio del hermano para sanar sus heridas… Prójimo es el que se preocupa del corazón del hermano, de su alma, aunque para socorrerle tenga que hacer girones el suyo y poner en peligro su vida. Prójimo es el que arriesga todo por amor, por intentar el triunfo de la misericordia y la compasión, que es el verdadero reinado del Corazón de Jesús que las Samaritanas tanto perseguimos y anhelamos.
Las Carmelitas Samaritanas estamos para eso en Valdediós: ser Samaritana es vivir la doble vertiente de dar de beber a Jesús sediento junto al Pozo y de acoger y sanar a todos los prójimos heridos que nos encontramos en el camino. Contínuamente nos encontramos a personas gravemente heridas, personas rotas y maltrechas que han sido asaltadas por los bandidos de hoy, que desnudan a nuestros hermanos de su dignidad de hijos de Dios, los apalean manipulándolos y robándoles la Gracia y la Paz y los dejan medio muertos, heridos por el pecado y la ausencia de Dios en su vida, condenados a morir para siempre si nadie los socorre y cura sus heridas y les lleva a beber el Agua Viva.
Dice el pasaje evangélico que el Buen Samaritano cargó al hermano herido «montándolo en su propia cabalgadura»… Nosotras cargamos en nuestra propia cabalgadura -en nuestro corazón- a los que encontramos en el camino, porque los llevamos en nuestro regazo, en nuestra vida, en nuestra oración… y ya no nos desentendemos de ellos nunca. De alguna manera misteriosa, pero real, permanecen en nuestros corazones para siempre, porque una madre -y una Samaritana lo es- nunca se desentiende de un hijo aunque físicamente no esté con él.
Y por último… termino comentando una fotografía que me encanta: las hermanas que llegaron el viernes (la «segunda entrega» 
de Samaritanas destinadas a Valdediós) tuvieron la ocurrencia de parar el coche cuando estaban a punto de llegar y hacerse una fotografía junto a la señal que indica ya la proximidad del monasterio. Es una fotografía preciosa y llena de vida: sonrientes, felices, derrochando amor, generosidad y alegría, nos indican por dónde se llega, por dónde se va a Valdediós, al SALVADOR. Ellas nos llaman y nos convocan para ir al Salvador, nos muestran el camino de la salvación, del amor, de la alegría…. Nos indican por dónde se baja -hay que abajarse, pero con mucho gozo- para entrar en el Valle de Dios, en el Regazo de Dios, en el Misterio de la ternura y la compasión de todo un Dios…
Adolfo, el párroco de San José de Gijón, me dijo si podría ir yo a celebrar la misa de hoy. Bien sabía él que me gustaría ir. D.Jesús, nuestro arzobispo, decidió hacerlo él. Estoy con el deseo de celebrar ahí y sé que me llegará esa oportunidad Que Dios las colme de bendiciones.
Que grandioso se ve todo, que hermosos son los caminos de Dios para con vosotras, al atardecer se confundían los caminos y la noche junto todos en uno sólo que conducía al Amor y al amanecer os encontrasteis con Dios en el Valle que lleva su Nombre!!
Queridas Samaritanas sois el ejemplo más vivo en estos tiempos de confusión y angustiade que la Misericordia de Dios está presente, y se hace palpable en cada una de vosotras,
Que fantástico es que de nuevo Él os vuelve hablar en evangelio de la primera misa dominical que se va a celebrar en el Santuario.
Como dice la madre Olga no existen casualidades, lo que realmente existe es la Providencia Divina y así os lo está mostrando a cada momento.
No es casualidad que el evangelio del primer domingo sea el Buen Samaritano!!
Vosotras las Samaritanas habéis llegado a Valdediós, con una gran misión la de curar las heridas de todos los que nos iremos acercando a ese maravilloso Valle, porque sólo contemplando las imágenes del paisaje y respirando el aire que mueven sus árboles sentiremos la cercanía de Dios y nos sentiremos consolados por Él!!
Gracias Samaritanas por abrirnos las puertas que nos conducen al cielo!!
Gracias hermanas tan queridas, por ser hoy mis samaritanas. Soy Lili de Argentina. Cuando Sta. Teresita vino a ayudarme a salir de la depresión en el 2014 las conocí a uds. a través de las charlas de la Madre Olga .
Gracias Corazón ♥ de Jesús.
¡¡Todo es gracia!!…Hay momentos en la vida que no tienen explicación humana…..Cuando vuestros amigos, entre los que me encuentro, estaban con pena por el problema que teníais….Surge la buena noticia de VALDEDIOS…..¡¡Me uno a vuestra acción de gracias y a vuestra alegría!!
LINDO ESTE MOMENTO.DIOS LE BENDICE Y LES ILUMINA Y COLOCA UN SEQUITO DE ANGELES PROTECTORES,BENDECIDORES Y SURTIDORES DE TODO LO QUE NECESITAN,DIOS LAS CONTINUA ILUMINANDO Y SUPONGO QUE TODAS ESTAN YA ALLI. O ALGUNAS SE QUEDAN EN VALLADOLID?.UN ABRAZO Y BENDICIONES DESDE CALI COL.
Queridas todas , parece que el monasterio ha renacido con vuestra presencia , ojalá podamos compartirlo , trabajo mucho , pero sé que ganas de desarrollarlo mucho más , así que un gran arco iris de todos los colores desde hace una semana se ha instalado en Valdediós, muchas fuerzas, y Más ilusiones 👏👏👏👏👏👏👏
Muchas bendiciones para su Instituto en el VAlle de Dios. Gracias por el envío. Las sigo desde hace unos meses, gracias por sus compartires que enseñan tanto!! Un abrazo desde Perú. Amparo C.
Es impresionanate ver el hilo conductor en esta historia escrita sin duda por Dios mismo, El es Quien va dejando su huella en la historia personal de este hermoso Carmelo Samaritano,… todo es exacto, todo coincide, todo se dá a la perfección en cada paso, en cada actuar, en cada acontecimiento, es el Señor mismo manifestado en cada una de vosotras, queridas hermanas.
Estoy feliz por vosotras, me alegro de verdad con todo el corazón, y como dice nuestra queridísima madre Olga, que nunca se desentienden aunque un hijo no esté físicamente presente, así estoy yo con vosotras que aún sin conocerlas he permanecido FIEL en el corazón pidiendo incesantemente que halléis un lugar definitivo en donde Dios se glorifique en vosotras, y vosotras encontréis en El el gozo que estáis viviendo ahora, y que nos llega a nosotros como una brisa vivificante renovando nuestro espíritu,
¡ Soy feliz por ustedes !
Un abrazo inmenso para cada en particular
María Eliana
Sois bálsamo para la humanidad,.no os conozco, solo a través de Internet, pero el apostolado lo percibimos todos. Dios os bendiga. Que la alegría que tenéis, nunca os falte. Me encantaría conoceros personalmente. Madre Olga, pido su bendición para mi hija, que lo está pasando mal.. Un cariñoso abrazo para cada una de vosotras.
Es un gran placer poder estar en contacto con ustedes y cuento los dias para visitarlas. ¡¡Que suerte para Valdedios contar con una comunidad llena de vida !!
SON LA ALEGRIA DEL VALLE Y LA VIDA DEL MONASTERIO.
Enhorabuena Asturianos por esta gracia de Dios.
Desde Burgos con amor Mª Nieves