Hora Santa
Jueves 18 de mayo de 2017
Señor, que de verdad nunca nos apartemos de Ti, que nada ni nadie, ninguna circunstancia de ningún tipo próspera o adversa y ninguna persona nos aparte nunca de Ti.
¡Es tan grande estar contigo, vivir contigo, pertenecerte…! Que lo más triste, el verdadero mal, el único mal real es apartarnos de Tí.
Jesús… si me equivoco, si voy por el camino que no es, llámame fuerte, llámame a Ti, llámame a tu Corazón, llámame a la Luz, llámame a la Verdad, sácame de mí misma, llévame contigo y háblame al corazón. Sácame de mi obcecación, de mi oscuridad, de mi ceguera… sácame de mi error. Llámame con fuerza a Ti, a la verdad, a la sencillez, a la inocencia, a la verdadera alegría. No desistas, no te canses, no me dejes por imposible, no te rindas, sigue luchando por mí y devuélveme a Ti: a la Alegría, a la Gracia, a la Vida. Si mi corazón está cerrado no te canses de insistir; si mi corazón está obcecado no te canses de intentar iluminarlo; si mi corazón de entrada te rechaza… Tú insiste: derriba mis muros, mi resistencia, mi dureza de corazón… y no permitas que me aleje de Ti, no permitas que mi egoísmo sea más fuerte que yo y me lleve en la dirección equivocada.
Llámame con fuerza, enséñame a amarte, enséñame la alegría de volver a Ti, recuérdame que en el cielo hay mucha alegría si regreso y mucho dolor si permanezco lejos.
Muéstrame el amor del Padre, la misericordia del Padre, la ternura del Padre, la alegría del Padre cuando yo regreso: ¡no te canses! Sé que no te cansas, es tontería que te lo diga pero… necesito pedírtelo una vez más: llámame con fuerza, devuélveme a Ti, a la Alegría, a la Paz, a la Bondad, a la Verdad y concédeme un corazón como el tuyo, unas entrañas como las tuyas y la gracia de comprender la vida como Tú la comprendes, de mirar a todos los hombres cómo Tú los miras y experimentar de alguna manera la benevolencia, la compasión, la ternura que por cada uno sientes. Enséñame a no juzgar o a juzgar sólo cómo Tú juzgas, enséñame a amar cómo Tú amas, a sufrir por lo que Tú sufres y enséñame a morir por mis hermanos cómo Tú has muerto por mí. Especialmente enséñame a besar y a bendecir a aquéllos que más me hieren.
Soy muy torpe pero tú eres mi Maestro y con tu bondad, tu paciencia y sobretodo con tu Gracia, confío en que podré lograr aprender a amar cómo Tú amas. Dame un corazón como el tuyo, un corazón igual que el tuyo, un corazón que ame y sienta como el tuyo.
Gracias Madre por compartir con nosotros su experiencia de Dios, el mundo necesita personas que vivan en Dios y para Dios y que lo compartan con los que tenemos una fe tibia, su vivencia me ayuda a confirmarme un poquito más en la fe.
Gracias, que Dios la bendiga.
Un abrazo.
Luisa
Con tan gran Maestro y con usted Madre Olga cómo discípula aventajada,el camino va a estar bien iluminado.Otra cosa será que nos despistamos de vez en cuando,pero con su ejemplo la travesía será mucho mejor.Un abrazo.
Gracias madre Olga, unidas en su corazón, ¡qué bien me ha hecho leer esto hoy! Te acompaña mi oración, gracias por compartir tanta vida. Un abrazo de pascua!
Pil
Bellisima oración!!!…Marca nuestras vidas!!!…Marcó mi vida!!!….Entre más fuerte me llame Dios…por lejos que parezca estar…lo siento cerca!!!…ENTRE LAS ESPINAS (ME AYUDÉ REZANDO ROSARIOS) PARA OBTENER LAS ROSAS (PRESENCIA DIVINA DE DIOS AMOR)…. PERO EN ESE PRECISO MOMENTO…TODO ESTO SE DABA… PORQUE ALGUIEN ESTABA ORANDO POR MÍ…POR NOSOTROS…POR EL MUNDO ENTERO….Muchas Gracias!!!….ESTIMADA MADRE OLGA MARÍA DEL REDENTOR, CSCJ…🙏🌹💗💞
Maravillosa oración que interpreta e interpela las fibras más íntimas de mi ser!! La he transcripto al papel , de puño y letra y ya pasa a ser una de mis preferidas, a ser rezadas en mi oración personal diaria. Alabo a Dios por tantas gracias conque adorna y perfuma a la madre Olga, llegando el aroma enriquecedor hasta nosotros. Muchas gracias!!!!