Gran perfección con mucha suavidad

Otro rasgo y ya el último: gran perfección con mucha suavidad. Este es otro de los rasgos de la comunidad teresiana, de la vida Religiosa como la concebía Santa Teresa: gran perfección con mucha suavidad. Educar a las hermanas para una radicalidad evangélica, pero llevándolas con gran delicadeza. Una de las muchas contradicciones aparentes en el magisterio espiritual de la Santa Madre: radicalismo pero con delicadeza. Pues sí y ¡ella lo hizo!IMG-20191022-WA0221.jpg

En el ejercicio de este magisterio y de la autoridad en general hay un estilo: “que la Priora actúe siempre con amor de madre y que procure ser amada para ser obedecida” (Constituciones 9, 1). Esto, en el siglo XVI sonaba… No os puedo explicar cómo sonaba porque, aunque yo intento       imaginármelo, tampoco puedo; pero sonaba como una cosa muy extraña, muy extraña.

“Procure ser amada para ser obedecida”…  Pues ¡no! Lo normal era “coja usted una vara y de palos cuando no le obedezcan” Era lo usual, o sea, no es que fuera… ¡¡No!! ¡era lo normal! Y Santa Teresa dice: “¡No, no, no, no, no! ¡Que me quieran!, porque así hago con ellas lo que yo quiero.

¡¡Sentido común teresiano!! ¡Que me quieran porque así es más fácil llevarlas! Estar todo el día con la vara… Que me quieran porque así las convenzo de que hagan las cosas, ¿no? Eso es de un sentido común… ¡impresionante!

Es la actitud maternal -no maternalista- porque luego también esta interpretación de “ser amada para ser obedecida” ha dado lugar a cosas muy… a deformaciones también en la vida religiosa del Carmelo: y tú te puedes encontrar con -en vez de una Priora- una especie de merengue con la corte celestial alrededor y todas haciéndole ahí la corte. ¡¡No!!

Una cosa es la maternidad y los sentimientos maternales y otra cosa es ser un merengue. ¡El maternalismo es lo peor! porque va directamente contra la vida espiritual, contra la entrega a Jesucristo y contra todo. Si en vez de una Priora tienes una abuela, se cae todo abajo.IMG-20191103-WA0081.jpg

Una madre es una madre, pero es una mujer firme y con criterio y que sabe lo que tiene que hacer, que da todo el amor del mundo pero luego toda la rectitud también, que educa y no malcría. Una abuela pues… ya chochea, ya no sabe si va, si viene… si sube, si baja… ya no sabe lo que es recto y lo que está torcido, y ¡consiente todo! A mí me encantaba ir a casa de mis abuelos porque me consentían hacer muchas cosas que mi madre no me consentía, por ejemplo, porque los abuelos son abuelos. Y la Priora es Madre, no es abuela, no debe de serlo, vamos…

Hablamos de una actitud maternal, no maternalista, que acompaña con suavidad a la vez que corrige, amonesta, pone en la verdad y ayuda a crecer a quienes le han sido confiadas dejándose de niñerías. Mantener la obediencia bajo la ayuda persuasiva del amor es una faceta más y muy característica del humanismo teresiano. Son rasgos no exclusivos, por supuesto. Hay otros santos que también lo han vivido así y lo han enseñado así, por ejemplo, San Francisco de Sales va mucho por esa línea, ¿no? Pero sí, que es cierto que, en su momento, esto dio un sello de singularidad a lo que Santa Teresa estaba haciendo.

A estos podrían añadirse muchos otros matices. IMG-20190807-WA0132.jpgEn todo caso, podemos afirmar que el modelo de comunidad que Santa Teresa propone y el estilo que lo caracteriza fueron totalmente innovadores en su momento; de esto no hay ninguna duda. Sus aportaciones al concepto y desarrollo de la comunidad en ese momento histórico son muy importantes y de gran interés.

Su trayectoria fue pasar del “no-grupo” al grupo, de la “no-comunidad” a la comunidad, en la convicción de que solo las comunidades fuertemente unidas pueden mantener la pureza de un ideal con auténtica capacidad de tradición. Solamente una comunidad que de verdad vive y es una en el amor, puede dar testimonio, puede crecer, puede mantener el ideal sin que decaiga, sin que se venga abajo, y puede irradiarlo, puede contagiarlo, puede transmitirlo.

 

 

 

2 comentarios en “Gran perfección con mucha suavidad

  1. Saludos desde Lima-Perú!!Felicitaciones Estimada Madre Olga María del REDENTOR, CSCJ!!!. Debido a mi historia y experiencia personal no ubico, no logro, no puedo entender con claridad el término “Madre y tampoco el término Maternidad Espiritual”. Soy soltera enamorada de Dios en la persona de Jesucristo desde la edad de 28 años. LO QUE SÍ EXPERIMENTÉ, FUE LA ORACIÓN CON LA EFUSIÓN DEL ESPÍRITU SANTO, EN UN GRUPO DE LA RENOVACIÓN CARISMÁTICA CATÓLICA (Regentado por sacerdotes Franciscanos Capuchinos de Arequipa, Perú). Y PUEDO DAR FE DE MI EXPERIENCIA PERSONAL Y DE GRUPO DE QUE “DIOS ESCRIBE SU PALABRA EN NUESTROS CORAZONES”, propiciando el crecimiento espiritual del orante. Volviendo al texto, pienso que tanto Madre PRIORA como Madre Maestra, son las columnas donde descansa el edificio espiritual de toda comunidad de vida contemplativa consagrada; por lo tanto, pienso que deberían reunir todas las capacidades inherentes a sus responsabilidades. No concibo la corrección sin la efusión y acción del Espíritu Santo de Dios. Es Dios quien nos corrige. En cuanto a trato con los Superiores, la norma establece la obediencia inmediata y con agrado de los hijos. Quien obedece, nunca se equivoca. Con respecto a la manera de corregir de una consagrada, dice mucho de su relación con Dios y de sus valores éticos y morales. Los frutos del Espíritu Santo de Dios describen el comportamiento de una persona. Misericordia, caridad, bondad, amabilidad, mansedumbre y paciencia van de la mano con la Verdad. 🎉🎉🎉🙏🏻🌹🙏🏻🌹🙏🏻🌹🙏🏻👍🏻👍🏻👍🏻💕💖💝💕💖💝📿📿📿🇪🇸🇪🇸🇪🇸🇵🇪🇵🇪🇵🇪

  2. ¡Alabado sea Jesucristo! La comunidad que vive en el amor, son una, crecen, dan ese testimonio de Unión, que rezan por toda la humanidad, que su entrega de amor es para nuestra salvación, muchos nos enteramos y sabemos vuestro sacrificio, por amor y a lo mejor otros ni siquiera se enterarán; pero sigue la comunidad, con una Priora que es un ejemplo de caridad y misericordia, no por nada lo es, elegida por el Espíritu Santo, guiada por él; hija de Santa Teresa, predilecta del Carmelo. Madre nuestra Olga María, quee el Señor siga guiandola por los caminos, que el le pide, Sola no, con él siempre, para él Nada es imposible. Felicidades!!! Por la nueva casa en Segovia. Le sigo, admiro, le quiero. En el sagrario encontremosno. Un abrazo.

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